Sunday, September 23, 2012

MARAVILLA Y CACHITO, LOS CAMPEONES !!!

It was already twelve years ago that i traveled to Buenos Aires, Argentina, following my dreams;  exactly the same as Cachito (the character in this Leon Gieco's song).  Fortunately I didn't need a "going back" ticket, like Cachito did.

I continued traveling around the world, but...who knows? maybe one day I will come back to my city for good, (unless I hope not as a defeated man).

Anyway.... Cachito is a kind of Argentinian hero, not because of his victories, but for his courage.

This is my tribute to one of the great songs of the contemporary Argentinian music, and to "Maravilla Martinez", skillful boxer who won the World Championship this week in the Caesar Palace, in Las Vegas, U.S.A.

Ya hacen doce años que me subí al "micro" para ir a Buenos Aires, exactamente lo mismo que hizo Cachito, el personaje de esta canción de León Gieco. Afortunadamente no he necesitado un billete de vuelta, como pasó con el pobre Cachito.

He continuado viajando por el mundo y viviendo en diferentes sitios, aprendiendo y aprendiendo. Pero... quién sabe?, tal vez algún día regresaré a mi ciudad del interior de Argentina (aunque espero que no como un hombre derrotado, que fué el caso de Cachito).

De todas maneras, Cachito es una especie de Héroe Argentino, no a causa de sus victorias, sinó por su coraje, algo que siempre ha caracterizado a los Correntinos.

Este es mi homenaje a una de las grandes canciones de la música contemporánea Argentina, y a Maravilla Martinez, que esta semana ganó el campeonato mundial de Boxeo en el Caesar Palace de Las Vegas.



Saturday, August 11, 2012

BUSCAR REFUGIO





“Ayer morían en Bosnia los que ahora mueren en Bagdad”
                                                                                                 Papá cuéntame otra vez (Ismael Serrano)

Mohammed es un médico iraquí que hace cuatro años llegó a Suecia. Su condición legal ha sido desde el principio la de refugiado.
Había estudiado y se había formado como médico en Irak. Allí, en Bagdad, trabajaba, tenía una familia y hacía poco tiempo se había casado cuando comenzó el conflicto bélico con los Estados Unidos. Con el comienzo de la guerra todo se desmoronó: el hospital donde él trabajaba dejó de existir. Tuvo que irse de Irak. Solicitó asilo en Suecia, donde le dieron refugio.

Su carrera de médico había sido larga: luego de recibirse se había especializado como cirujano en su país. Al llegar a Suecia tuvo que comenzar otra vez desde el principio. Primero tuvo que hacer un examen de medicina para poder validar su título universitario de grado. Al mismo tiempo tuvo que estudiar sueco. Tuvo que rendir exámenes para certificar su destreza con el nuevo idioma que aprendió. Una vez superada esta etapa inicial tuvo que comenzar el camino de la especialización, comenzando por hacer un practicantado de 24 meses, durante los cuales pasaría por períodos de supervisión de su trabajo como médico en diferentes especialidades: medicina interna, ginecoobstetricia, pediatría, anestesia y cirugía. Todo este periplo le había llevado en total cuatro años hasta el momento  en que lo conocí.

Los dos estábamos comenzando… yo llegando de España, con el sueco como mayor desafío. Si bien había aprobado los cursos de idioma, el agotador esfuerzo de hablarlo consumía mucha de mi energía. Pensar en la tarea con el paciente, al mismo tiempo que en el idioma sueco, utilizando el idioma médico, que por su terminología constituye una lengua por si misma, es sumar tres desafíos simultáneos, (coincidíamos con Mohammed en este punto al conversar).

Mohammed me cuenta que su hermana vive en Montreal, Canadá, y que otro de sus hermanos vive en Dubai donde trabaja como ingeniero. Tanto Mohammed como su hermana no pudieron quedarse en Dubai, el primer lugar al que habían decidido emigrar huyendo de los peligros de la guerra. Allí les dijeron que tanto a él como a su hermana no se les podría prolongar el permiso de residencia. Buscaron entonces destinos alternativos… una en Canadá, el otro en Suecia.
Afortunadamente para ambos las cosas funcionaron y los aceptaron en los países a los que se desplazaron. Mohammed inició su practicantado médico mientras mantuvo su condición de refugiado y con ello el permiso temporal de residencia. La hermana de Mohammed también se pudo adaptar muy bien a la vida en Montréal.


Su mirada, lejos de reflejar algún viso de dureza o resentimiento, está llena de bondad. Amistoso, dispuesto a hablar, todo el tiempo demuestra la mejor disposición a trabajar. Cuando hablo con él sobre mis deseos y mis expectativas dentro de nuestra profesión, y comparto con él lo vivido a lo largo del extenso peregrinaje que me llevó a través del mundo al irme de mi país, el me da la impresión de sólo limitarse a escuchar. Sólo lo puede comprender desde el punto de vista del refugiado…de aquél que tuvo que marcharse a vivir una cultura diferente por culpa de la guerra.
Me acompañaba a los quirófanos y cada vez que hacía algo, yo trataba de explicarle todo lo que sabía sobre la técnica que estaba haciendo, transmitirle las cosas lo mejor que podía. Él estaba agradecido.
Una mañana llegué un poco cansado a los quirófanos, seguramente por el trajín de la semana, por el peso que me significaba la adaptación al nuevo ambiente de trabajo, a la cultura, a la enorme cantidad de gente que estaba conociendo, a los pacientes. Todo era de hecho un enorme cambio para mí… los medicamentos tenían nombres diferentes, las unidades en las que se miden los valores en sangre eran también diferentes, los esquemas de antibióticos para la prevención de las infecciones en el quirófano, así como en la unidad de cuidados intensivos…todo era diferente. Simplemente traté de no pensar en eso, y concentrarme en el trabajo poniendo manos a la obra.

Habían tres artroscopias de hombro y una cirugía de antebrazo. Le pregunté a Mohammed si me podría ayudar y me acompañó, recogimos el ecógrafo y nos pusimos en marcha. Hicimos los bloqueos interescalénicos guiados por ecografía. Tanto los pacientes como los cirujanos y las enfermeras se mostraron satisfechos por los resultados. Eso significaba mucho para mí. A pesar de tener mi especialidad aprobada en el  nuevo país, y mi empleo del idioma ser el adecuado, toma tiempo ganar la confianza del equipo con el que se trabaja, demostrar en la práctica que el funcionamiento en el sistema cada día es adecuado y la adaptación a los ojos del equipo es satisfactoria.


Habían pasado unos días, y como cualquier ser humano que tiene días mejores y peores, ese día me sentía un poco down. Mohammed me vió sentarme junto a él en el ordenador con cara de cansado, y tal vez algo triste. Entonces se inclinó y me dijo en voz baja que había estado conversando con las enfermeras… y que ellas contaban lo contentas que estaban con el nuevo anestesiólogo. Que tenía que estar contento, que las cosas estaban muy bien. Me contuve, la consciencia me dio la fuerza suficiente para que la humedad de mi conjuntiva no se desbordara en lágrimas. Por la angustia contenida y por la alegría de sentir que se está venciendo la resistencia de los códigos de una cultura y un idioma diferentes.


Luego de unos días en un momento de descanso la conversación continúa. Eduardo, mi compañero de Ecuador, conversa con nosotros y hablamos sobre cómo muchos médicos de diferentes países de América emigramos hacia otras tierras buscando enriquecer nuestra formación, conociendo Universidades y Hospitales de otros países. Algunos se preparan para emigrar a los Estados Unidos, otros a Europa, preparamos exámenes, estudiamos idiomas. Al final cuando lo conseguimos, nos alejamos de nuestras familias por un tiempo, o tal vez permanentemente.


Es entonces allí donde el lado del rincón del alma desde donde se ve el mundo se invierte: Ahora él – Mohammed-  humedece sus ojos, mira hacia arriba sin mover la cabeza,(tal vez recordando la miríada de días de vida desde el momento de nacer que pasó en su Bagdad natal hasta el día que la volaron de la faz de la tierra –al menos tal como era-). Luego me mira y me dice… “nosotros somos muy apegados a los lugares en los que vivimos, nos cuesta mucho movernos. Una vez que nos establecemos en un lugar los sentimos como nuestro, tenemos hijos en él, y trabajamos la tierra. A partir de ese momento, ese lugar es nuestra tierra. Ya no pensamos en irnos”. 

Tuesday, July 17, 2012

EL TIEMPO NO PARA


Para todos mis más queridos amigos y familias, en Paraguay, España, Suecia y Argentina.
(Para Heber, Dana, Facu y Elías)

A raíz de la destitución del presidente electo de Paraguay, Fernando Lugo, Latinoamérica se pone a reflexionar sobre el dolor que da cada golpe que la democracia recibe. Un golpe de estado parlamentario gestado desde un partido de derechas fundado por un dictador (El general Stroessner), manipulando las leyes y utilizando como excusa una supuesta mayoría en las cámaras, decide interrumpir el mandato de un presidente electo sin dejarle opciones más que la de retirarse cuando sólo falta un año para que termine su período de gobierno.

Del otro lado del océano en España, la corrupción de niveles catastróficos y el DESGOBIERNO del partido actualmente en el poder -que simplemente abre paso a los bancos expoliadores que llegan en nombre de la “Europa Central” y los organismos de crédito como el FMI- hunden en la misera a millones de desesperanzados ciudadanos.

La sensación es la de que siempre son los mismos los que sufren las consecuencias: los más débiles, los desposeídos, los inmigrantes, las minorías más expuestas.

Los zorros inteligentes, listos, brillantes, al comando de empresas y bancos,  laceran el tejido social, descomponiéndolo, debilitándolo, como un organismo que se debilita y se necrosa…hasta que se pudre.

Y el camino de regreso, de recuperación de esas heridas sociales es muy largo, y no todos los países-organismos tienen capacidad de cicatrización.

Y en este contexto internacional, una vez más vemos que la luz está en LATINOAMÉRICA.

Si lo sabremos: ese año 2001 inolvidable en que Argentina colapsó económicamente, ( en que se instaló la crisis económica más profunda de la historia de ese país, de la que hemos conseguido con mucho sacrificio y 10 años de devenir, recuperarnos), es el molde en el que basaron la ingeniería financiera que hoy está haciendo colapsar a todo un continente, en este caso Europa.

Entonces, Heber (querido, apreciado, fraterno amigo, excelente cardiólogo y filósofo ) se acuerda de mí, de las miles de horas compartidas en Buenos Aires en aquellos años cuando hacíamos la residencia de Cardiología, y me escribe un post en mi Facebook:

"como estas amigo, seguro te enteraste de todo lo que pasó en mi pais, triste y lamentabe...sin embargo, se esta despertando en mí y en muchas personas el compromiso de la resistencia... estamos del lado correcto, estamos luchando. Te escribo todo esto por que se como pensas y en que crees, y que entendes...te mando un gran abrazo.."

Es que el sabía, que cada día que ha pasado de las últimas tres semanas, no he dejado de recordarlo, tanto a él como a muchos otros queridos hermanos paraguayos con los que he compartido importantes y felices momentos de mi vida.

Entonces recordé de repente la letra de una canción que transformé en uno de mis Himnos: “El tiempo no para”. Una canción que como muchas otras nos une como latinoamericanos cuyo autor, Cazuza fue uno de los emblemas del pop brasileño durante los años 80, y que en Argentina se inmortalizó con la versión que “la Bersuit Vergarabat” transformó en arte urbano que los argentinos hemos tomado como bandera.



Creatividad, talento, imaginación y un corazón enorme, eso es lo que ha hecho que los países de la américa del sur nos levantemos, y defendamos nuestras democracias, defectuosas, tambaleantes, pero nuestras.

LATINOAMÉRICA, nos pegan, pero nos volvemos a poner de pié.
LATINOAMÉRICA, nos quieren dividir, pero nos juntamos y nos hermanamos.
LATINOAMÉRICA, hoy todos miran hacia tí y ven cómo te agigantas.
LATINOAMÉRICA, hoy una canción te describe, alimenta tu resistencia e inspira a otros…
          
                                                              EL TIEMPO NO PARA


TIME DON'T STOP


Dedicated to all my best loved friends & families from Paraguay ,Spain, Sweden and Argentina
(to Heber, Dana,Facundo and Elías)


                            As a result of removal of the president-elect of Paraguay, Fernando Lugo, Latin America begins to be concerned about the pain that gives every hit that democracy receives.

A parliamentary coup gestated from a right-wing party founded by a dictator (General Stroessner), by manipulating the law,  using as an excuse the alleged majority in the senate, interrupts the mandate of an elected president without letting to him more options than step aside when is only one year still to finish his term in the government.

From the other side of the ocean, in Spain, the catastrophic level of corruption and mismanagement of the current party in the gorvernment ( which simply opens the way for banks spoilers coming in the name of "Central Europe" and lending agencies like the I.M.F.) sink in the poverty to millions of hopless citizens.

The feeling is that there are always the same those who suffer the consequences of these deficient and misleading policies: the weak, the dispossessed, immigrants, the  minorities most at risk.

And the way back, recovery of these social wounds is very long, and not all the countries( like organisms ) are capable of healing.

So I remember 2001, the year when Argentina went to bankruptcy and the worst economic crisis in its history began, and how this “crash” became the pattern in which the stockmarkets based the financial engineering that lead to the collapse that today affects  a whole continent:  Europe.

Then, one of my best friends, from Paraguay, Heber, writes a post on my wall in Facebook, concerning the situation in Paraguay and how he thinks about our friendship and all our shared ideas end experiences when we did our residency program in Buenos Aires.

And it’s true, in the last three weeks I didn’t stop thinking about all my loved friends from Paraguay, with who I have such a valuable friendship,  (Paraguay, that beautiful land), and at the same time I remembered one of my favourite songs, from a Brasilian composer, Cazuza: “El tiempo no para”. This song later became very popular -as popular as a hymn- in Argentina, thanks to a cover from “La Bersuit Vergarabat”, a very popular rock band.

LATIN AMERICA, we receive a hit, but we stand up again.
LATIN AMERICA, somebody tries to divide us, but we stand together as a brotherhood.
LATIN AMERICA, now everybody looks at you and see how you become greater and greater.
LATIN AMERICA, today a song describes you, feeds your strength and inspire other lands...

EL TIEMPO NO PARA.







Friday, April 20, 2012

YPF, CÓMO SE VE DESDE EUROPA EN PRIMERA PERSONA

Muchas han sido las emociones que nos han movido esta última semana.

La recuperación de YPF (yacimientos petrolíferos fiscales) por parte del Estado Argentino ha dado la sensación de que se ha "pateado un avispero" en la comunidad internacional. 

Pero ni una hoja se movió cuando en 1992, en medio de la comodidad de los viajes a Disneylandia y el voto-cuota, y el 1 a 1, los argentinos miramos para otro lado mientras la enorme riqueza hidrocarburífera del país se subastó y se entregó en bandeja a empresas privadas (Privadas, ninguna participación del Estado Español). 

Dos culpables: El pueblo Español, por tragarse el cántico de que esta nacionalización les afecta como nación,   cuando los españoles de a pie ni siquiera han visto un duro de las ganancias de Repsol  invertidas en otra cosa que no sea la moto del Dr. House y El pueblo Argentino, por reparar tardíamente sus errores, y no castigar a los responsables, también Argentinos ( lease: la patota del Patilludo riojano, los Corach, los Cavallo, los Cohan, los Alsogaray, los Manzano, y la lista es larga...) de entregar impunemente el patrimonio de su propio país a capitales extranjeros.




Otros países, como Suecia, comprenden la situación y entienden la medida tomada por Argentina en este conflicto, lo cual, tratándose Suecia de un país con una fuerte tradición de protección del patrimonio público, les parece naturalmente lógico.
Y yo me pregunto... dónde estaba la "comunidad internacional" que ahora esta tan enojada, cuando Argentina quedó economicamente desmantelada?. Hubo alguien que nos ayudara?.

Escucho respuestas.